jueves, 17 de abril de 2014

Sobre el éxito de Pinar del Río y Alfonso Urquiola



VÍCTOR MESA, UD. 
GANÓ LO QUE 
LE CORRESPONDÍA
. El "Pinar del Río" y Alfonso Urquiola estarán en la venidera Serie del Caribe... 
sin fastamas alrededor



M.Sc. MIGUEL A. GAÍNZA CHACÓN


Alfonso Urquiola
Una parte considerablemente importante de los amantes del béisbol en el archipiélago cubano vibraron de emoción el miércoles por la noche, cuando el flemático Baños ponchó con un “rompimiento” hacia afuera al excelente bateador Ariel Sánchez, entonces, solo entonces, el maestro, el profesor Alfonso Urquiola y el resto del team vueltabajero dieron riendas sueltas a su euforia en el terreno del “Victoria de Girón” para exteriorizar una alegría sin límites: ¡Pinar del Río CAMPEÓN de la 53. Serie Nacional de pelota!
Con esta victoria resonante, Urquiola ratificó que es el REY del béisbol cubano: Seis veces campeón como jugador y ahora ¡cuatro veces campeón como manager! Eso es lo que se llama un manager triunfador, capaz de arrastrar tras de él a jugadores noveles y avezados, maestro de la humildad y de lo más trascendental: capaz de aunar alrededor de su figura, a los aficionados no solo   pinareños sino a millones de cubanos, desde el Cabo de San Antonio hasta la Punta de Maisí, y de más allá del mar.
Pinar del Río rie
Y del otro lado ¿qué? Un “Matanzas” que no daba crédito a lo que estaba viendo en su propia guarida; unos cocodrilos que evidentemente no solo se marearon con el humo del mejor tabaco del mundo sino que se veían perturbados y acabados en su madriguera, debido a la arrogancia y a los desatinos de un mentor como Víctor Mesa, pelotero que llegó a “meterse” en un bolsillo a los cubanos de Oriente a Occidente, y que lamentablemente en su rol de director, no solo no ha ganado nada, así: NADA, excepto un Rootterdam, ayudado por figuras en el terreno, que luego él mismo se ha encargado de denigrar sin piedad, ante los medios informativos.
Una matancera se preguntaba en la red de redes ¿por qué tanta gente en Cuba, de Este a Oeste y de Norte a Sur le iba al “Pinar del Río” y quiere con vehemencia que no gane el “Matanzas”? Por un solo motivo: POR SU DIRECTOR, única y exclusivamente. No es contra los jugadores, muchachos que se merecen el reconocimiento por su entrega y acometividad en el terreno, y por una paciencia sin límite para soportar gestos y palabras soeces de su conductor. 
Porque en el colmo del desplante, Mesa la emprende con todo lo que está a su alrededor. Y no se salvan de su mordacidad ni estudiantes de Periodismo, incluso: ni los propios refuerzos orientales que él mismo escogió y que se entregaron en cuerpo y alma a un equipo que no era el de ellos y luego el Sr. Mesa:
“Yo hago el mitin al finalizar el inning y trato de trasmitir ánimo a los jugadores, y Ud. ve a los orientales mirando hacia el cielo. Es que tienen mente de perdedores… vienen de equipos perdedores y no entienden lo que yo digo.” Sin comentario.
Por lo tanto, Víctor Mesa ganó lo que le correspondía. No hay equivocación. Ud. puede fallar una, dos, tres, cuatro veces pero sumar años y años a intentos fallidos solo da un resultado: UD. señor Mesa, ES UN PERDEDOR. Y lo peor: UN PERDEDOR ARROGANTE, HUMILLANTE.
Una sugerencia: Vaya a Pinar del Río y hable con Alfonso Urquiola para que le de un seminario sobre cómo debe un manager comportarse en el terreno tanto con los contrarios, con la prensa, y hasta con los propios integrantes de su equipo. Aprenda lo que es humildad y comenzará –no estoy muy seguro—a ser un buen manager.
Hay quienes piden que Víctor se retracte de cosas que ha dicho. Por ejemplo, hay quienes solicitan aclaraciones sobre las manifestaciones del director matancero en relación con los estudiantes de Periodismo.
A estas alturas ni hace falta que Mesa se retracte. Esas palabras ofensivas a los futuros periodistas, a los jugadores y equipos orientales, a los periodistas, a los árbitros, a figuras del team Cuba,  no son cosas dichas en un momento de estrés. Esas manifestaciones integran la filosofía de Víctor Mesa por ende son parte de su personalidad. Eso no lo cambia ni el profesor Urquiola.
Un colega de la provincia Granma se preguntaba en la red: ¿Tiene padrino Víctor Mesa? Y argumentaba sobre los constantes desafueros del mentor matancero. Ya no es un problema de Mesa sino que son Higinio Velez, como máximo conductor de pelota en Cuba, y Cristian, director del INDER quienes deben de pronunciarse públicamente, como mismo hace Mesa, ante un panorama que ya ha colmado la copa.
Ahora el “Pinar del Río”, con su pueblo vueltabajero, y millones de cubanos más que disfrutamos con su triunfo, celebramos el décimo título de CAMPEONES de los tabaqueros. Y que se prepararen  bien para la venidera Serie del Caribe, en la que esperamos no ver en el banco cubano a figuras que con su sola presencia emanan discordia y malestar.
  

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